Anoche se rompió la racha positiva de los LAKERS en su visita al American Airlines Arena de MIAMI. Los LAKERS llevaban ocho victorias consecutivas, alguna de ellas de verdadero merito como ante los SPURS, en un partido muy completo de todo el equipo. En la noche de ayer, los HEAT, que venían de cinco derrotas consecutivas, sacaron lo mejor de ellos mismos, sobre todo en defensa y cargando el rebote ofensivo, y consiguieron una victoria crucial para su moral, muy dañada estos días.
En los LAKERS se echo en falta una mayor aportación del banquillo, salvo Lamar Odom, el resto del banquillo apenas aporto y se noto que la segunda unidad de Los Angeles, no asumió la responsabilidad que le correspondía. Esta situación unida a un fallo crucial de Kobe, cuando el marcador era de empate a 88, y a falta de 1:32, que acabó con mate de Lebron, fueron factores determinantes para que los LAKERS, acabaran perdiendo el partido. En el lado de MIAMI, Crhis Bosh estuvo fenomenal y tanto Wade como Lebron aportaron sus números. La clave estuvo en la aportación de Mike Miller, que desde el banquillo, aporto puntos y rebotes con los que quizás no se contaba tanto.
Una vez rota su racha de victórias, los LAKERS, deben mantener el nivel de juego demostrado en los últimos partidos, y así llegar a PLAYOFF en condiciones óptimas para afrontar la conquista de su tercer anillo. Mejorando su rebote defensivo y moviendo el balón con mayor velocidad que anoche.
